¿Qué son enzimas?
Las enzimas son proteínas que actúan como catalizadores. Esto significa que aceleran un proceso en todos los organismos. Las encontramos en todas partes, existen miles dentro de nuestro cuerpo y más en la naturaleza. En nuestros cuerpos, tienen un rol en muchas funciones biológicas críticas, incluyendo el metabolismo celular, desintoxicación de químicos y digestión.
La naturaleza confía en las enzimas para mantener los ciclos de carbono y nitrógeno necesarios para que la vida exista y persista. Con la ayuda de ciertas enzimas específicas, las reacciones necesarias para desintegrar moléculas orgánicas pueden ocurrir en milisegundos. Este tipo de reacciones están ocurriendo dentro de nosotros y son críticas para la vida.
¿Para qué son usadas las enzimas hoy?
Por miles de años, muchas civilizaciones han utilizado el poder de las enzimas en la elaboración de cerveza, queso y para hornear. Mientras las enzimas son usadas en muchas maneras similares hoy en día, la ciencia de las enzimas a evolucionado tremendamente, creando oportunidades para nuevas aplicaciones «eco-amigables y sostenibles»para muchas industrias. Las enzimas son utilizadas para mejorar la eficiencia de una variedad de procesos industriales — por ejemplo, en la manufactura de margarina, cerveza, yogurt, cuero, textiles y etanol. Las enzimas son, habitualmente, añadidas a detergentes para ayudar a remover manchas de las telas, comida pegada en platos sucios y contaminación de pacientes de instrumentos quirúrgicos, incluyendo endoscopios.
¿Para qué son usadas las enzimas en el reprocesamiento?
Cada año aumenta la cantidad de cirugías y seguirá en aumento mientras la población se expande y envejece, y más personas tienen acceso a mejores servicios de salud. Con un número de procedimientos en aumento, llega un aumento en el número y tipos de dispositivos médicos reusables, algunos complejos en diseño y requieren una tecnología de limpieza mejorada para reducir el riesgo de infección. La limpieza es el paso más crítico en el ciclo de reproceso para remover la contaminación visible así como la oculta. La limpieza meticulosa es crítica antes de la desinfección o esterilización. Los instrumentos quirúrgicos limpiados inapropiadamente y los complejos dispositivos reusables como los endoscopios, portan un riesgo incrementado para las infecciones asociadas a la atención de salud.
Los detergentes enzimáticos diseñados específicamente para la limpieza de dispositivos médicos reusables han estado presentes por décadas y algunos estudios han demostrado el mejor desempeño frente a los detergentes no-enzimáticos para limpiar dispositivos contaminados. Los detergentes enzimáticos formulados correctamente son usados para ayudar en los procesos en el tratamiento en el punto de uso, lavado manual, ultrasónico y automático.
Tipos de enzimas usadas en detergentes médicos
Los dos tipos de enzimas usadas principalmente para limpiar dispositivos médicos son proteasa y lipasa. Las protestas están diseñadas para digerir suciedades ricas en proteínas como la sangre, mientras que las lipasas atacan suciedades grasas como el tejido adiposo. Otras enzimas que son usadas tradicionalmente son amilasas y carbohidrasas/celulasas, las que degradan almidón y polímeros celulósicos, respectivamente, facilitando su remoción durante la limpieza. Estos contaminantes pueden ser encontrados en residuos humanos como las heces.
Combinar múltiples enzimas con un detergente formulado correctamente puede ser beneficioso para la degradación de una variedad de contaminantes y residuos humanos, así como películas orgánicas invisibles que pueden crecer en el tiempo debido a la limpieza inefectiva de los lúmenes y canales internos de ciertos dispositivos médicos como los endoscopios.
¿Cómo funcionan las enzimas en los detergentes?
Las enzimas son un componente importante de un buen detergente de limpieza y funcionan en sinergia con un buen surfactante, para ayudar en la remoción completa de suciedad clínica de los instrumentos quirúrgicos. Los detergentes enzimáticos son más efectivos cuando son usados acorde a sus instrucciones de uso. Dependiendo del tipo de enzimas usadas, los detergentes enzimáticos pueden degradar suciedades dentro de un amplio rango de temperaturas. Añadidas a un detergente bien formulado, las enzimas pueden mejorar la limpieza y seguridad y ser usados desde el tratamiento en el punto de uso hasta en el lavado automático en Central de Esterilización.
Los productores de enzimas trabajan de cerca con los fabricantes de detergentes para desarrollar la funcionalidad óptima para limpiar efectivamente los dispositivos médicos. Como con cualquier detergente, es importante seguir las recomendaciones del fabricante e instrucciones del dispositivo para mejorar la limpieza enzimática.